Nuestra frase de hoy es un refrán muy popular y usado desde antaño hasta nuestros días: “Al pan, pan y al vino, vino”.
¿Qué significa? Pues quiere decir que debemos llamar las cosas por su nombre: al pan, hay que llamarlo pan y al vino, hay que llamarlo vino. Básicamente nos advierte de que seamos claros a la hora de referirnos a ciertos asuntos que puedan parecernos embarazosos, puesto que sin eufemismos e indirectas todo resulta más sencillo.
El origen de esta expresión muy probablemente esté ligado a la liturgia católica, donde el pan y el vino eran elementos básicos de la comunión.
Pongamos una situación en la que podamos usar esta expresión:
Una chica invita a su mejor amiga a la fiesta de fin de curso de su clase:
–Nuria, este sábado es nuestra fiesta, ¿por qué no te vienes?
-No sé… es vuestra fiesta, solo conozco a varios de tus compañeros y no tengo nada en común con ellos, son un poco…
–Vaya, que no te gustan… chica, al pan, pan y al vino, vino.
Fuente gráfica: https://pixnio.com/es/comida-bebida/vino/rojo-vino-italiano-restaurante