En plena sierra gaditana, a tan sólo unos kilómetros de Benamahoma y de Grazalema, se encuentra El Bosque.
Esta pequeña localidad, que cuenta con poco más de 2000 habitantes, destaca por la belleza de su entorno, de sus calles y de sus casas; razones que le permiten formar parte de la famosa Ruta de los Pueblos Blancos.
El Bosque nació tras la repoblación de los lugares reconquistados por Don Rodrigo Ponce de León y Núñez en el siglo XIV, aunque no fue hasta 1815 cuando adquirió el reconocimiento de villa.
Las principales fuentes de ingresos de esta población vienen de la elaboración del queso payoyo y de embutidos, de la industria de la marroquinería, la fabricación de muebles y, hoy en día, sobre todo, del turismo.
Muchas son las opciones que El Bosque ofrece a sus visitantes: desde una visita al Museo del queso, un paseo entre sus calles, hasta la práctica de senderismo y otros deportes. Destacan el sendero por el río Majaceite en dirección Benamahoma, rutas en bicicleta e, incluso, práctica de parapente.
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