Hoy vamos a explicar un plato muy típico de la cocina tradicional de Andalucía: Los huevos a la flamenca.
Esta receta tiene una pinta exquisita y es muy española. Se cocina desde hace más de un siglo. Algunas teorías afirman que este plato pudo ser creado por un gaditano; sin embargo, otras aseguran que fue un cocinero sevillano. También podemos decir que esta receta fue incluida por el escritor español Camilo José Cela en su libro titulado “Primer viaje andaluz”.
Existen muchas versiones, pero todas tienen cuatro ingredientes en común,: el huevo, el tomate, los guisantes y el chorizo. Además, se pueden añadir patatas, judías, jamón serrano, espárragos, alcachofas, champiñones, etc. Cada uno prepara el plato a su gusto. Lo que no debe cambiar es que hay que cocinarlo en una cazuela de barro, ya que les le aporta un toque casero y a la vez mantiene la temperatura del plato. ¡Ah! Y el tomate que le pongáis a los huevos a la flamenca, os recomiendo que sea casero, ya que le da un sabor completamente distinto y hace que este plato resulte especialmente sabroso.
Con estos ingredientes, es imposible resistirse. Este es, sin duda, uno de los platos preferidos de toda mi familia. A mí me encanta por su nombre y por sus colores alegres, como son el rojo, el naranja, el blanco y el verde, que nos recuerdan a los colores de los vestidos de flamenca.
Y ahora, ¿os animáis a repararlo? …pues… ¡a la cocina!.
Ingredientes:
- Medio kilo de tomates rojos
- Una cebolla
- Dos dientes de ajo
- 80 gramos de guisantes
- Medio kilo de patatas
- 60 gramos de jamón serrano (unas cuatro lonchas)
- 50 gramos de chorizo
- Una pizca de sal
- Un vaso de aceite de oliva virgen
Elaboración:
- Ponemos los guisantes en agua hirviendo durante 10 minutos. Luego los escurrimos y los reservamos.
- Picamos la cebolla, la ponemos en una sartén a fuego medio con una cucharada de aceite de oliva virgen y sal.
- Bajamos el fuego a medio bajo y añadimos los ajos picados.
- Cortamos los tomates por la mitad, es quitamos las semillas y los pasamos por un rallador para eliminar la piel.
- Cuando la cebolla y el ajo estén dorados, añadimos el chorizo. Removemos durante un minuto. A continuación, echamos el tomate y lo cocinamos durante 10 minutos aproximadamente.
- Mientras se cocina el tomate, pelamos las patatas, las cortamos a rodajas y las freímos en la sartén con un vaso de aceite de oliva virgen. Cuando estén doradas, las ponemos en un plato con papel de cocina para eliminar el exceso de aceite y les echamos una pizca de sal.
- En una cazuela de barro, ponemos primero las patatas, luego añadimos la salsa de tomate, los guisantes, el jamón serrano y los huevos.
- Ponemos la cazuela de barro en el horno a 200 grados durante unos 12 o 15 minutos, hasta que veáis que el huevo esté hecho. La sacamos del horno y a comer.
- Gaditano: Persona de Cádiz.
- Sevillano: Persona de Sevilla.
- Guisantes: Es una verdura redonda, mide menos de un centímetro, es verde. Junto con las zanahorias se utiliza para acompañar carnes.
- Cazuela de barro: Recipiente de cocina redondo, más ancho que alto. Se utiliza para cocinar y para servir. Es de un material arcilloso, utilizado en cerámica. El barro es una mezcla de tierra y agua.
- Casero: Alimento que está hecho en casa.
- Sabroso: Con sabor agradable e intenso.
- Escurrimos: Del verbo escurrir. Eliminar el exceso de líquido.
- Picamos: Del verbo picar. Dividir en partes más pequeñas.
- Rallador: Utensilio de cocina con agujeros en relieve que sirve para dividir los alimentos en partes más pequeñas.
- Rodajas: Parte de una cosa con forma circular y plana.
- Mojar: Humedecer algo en agua u otro líquido.
Y para acompañar este plato tan delicioso, nada mejor que un buen vino tinto. ¡Ah! Y, por cierto, no podemos olvidar el pan para mojar en la salsa de tomate y en la yema de huevo. Tenéis que probarlo, os gustará.