La expresión que hemos elegido para esta ocasión es la siguiente: “Pedirle peras al olmo”.
Adivinar su significado no resulta muy difícil si sabemos que un olmo es un árbol frondoso, robusto y elegante que da frutos, pero no peras. Las peras, esas frutas deliciosas que todos conocemos, son el fruto del peral. Entonces, ¿cómo va a ser posible esperar de un olmo que nos dé peras? Es imposible.
Dicho esto, esta popular expresión se utiliza para advertir de que no podemos pedirle a una persona cosas imposibles de realizar, bien porque su inteligencia no se lo permite o bien por ser una acción inalcanzable.
Vamos a poner unos ejemplos:
- Rosa solo ha sacado un cinco en matemáticas.
- Bueno, al menos ha aprobado. No le pidas peras al olmo, ya sabes que no se le dan nada bien.
- Estuve en Londres con mi amiga… Increíble… ¡no dijo ni una palabra en inglés!
- Normal, eso sería pedirle peras al olmo. Ya sabes que nunca lo ha estudiado.
Glosario:
Frondoso/a: árbol que tiene muchas ramas y hojas.
Robusto/a: que es grueso y fuerte.
Fuente gráfica: https://pixabay.com/es/photos/camperdown-olmo-árbol-paisaje-316360/