Baelo Claudia: entre el Atlántico y las dunas

Entre el Altántico y las dunas, a unos kilómetros de Tarifa, se encuentra Baelo Claudia. Situada en la población de Bolonia, dentro del Parque Natural del Estrecho, se trata de una de las antiguas ciudades romanas mejor conservadas de nuestro entorno.

Data del siglo II a.C. y fue creada con un fin comercial, ya que era el enlace con el norte de África. Aunque puede que tuviera algunas funciones de centro administrativo, sus fuentes de riqueza fueron, sin lugar a dudas, la pesca, la industria del salazón y el garum. Este último consistía en una salsa derivada del atún, que solamente consumían los romanos de las clases altas de la sociedad, usado como sustituto del la sal y considerado como un alimento afrodisíaco.

Este “municipium” (municipio romano) que gozó de gran prosperidad en sus inicios, empezó poco a poco a decaer desde finales del siglo I d.C, debido a la crisis en la producción de sus fábricas, numerosas invasiones del Norte de África y, sobre todo, al maremoto que azotó la costa y que provocó muchos daños en Baelo Claudia. Así, la ciudad logró mantenerse con vida hasta el siglo V d.C.

Hoy en día, Baelo Claudia, se ha convertido en un importante reclamo turístico debido, evidentemente, a su importancia histórica y a la ubicación del yacimiento: enfrente de la playa de Bolonia, posiblemente una de las más hermosas de la costa gaditana, y al lado de una de las dunas más extensas de nuestra provincia. Además, la Junta de Andalucía en 2007 concedió la construcción de un museo, incorporado en la Sede Institucional y Centro de Visitantes del Conjunto Arqueológico de Baelo Claudia, obra del arquitecto Guillermo Vázquez Consuegra.

En definitiva, si visitas la provincia de Cádiz, no dudes en pasar por Bolonia, visitar el yacimiento: pasear por su vías, su foro, entre sus templos…, darte un baño en sus aguas frías y cristalinas, y disfrutar de unas vistas espectaculares e intercontinentales desde la parte más alta de sus dunas.